julio 3, 2024

Hacia la descentralización y apropiación de los espacios culturales en el suroriente

Ciudad Juárez, Chihuahua. – En el suroriente de Ciudad Juárez, el Parque Rotario de la colonia Carlos Castillo Peraza se ha convertido en un enclave de apoyo, convivencia y actividades culturales para adultas mayores de 60 años. Todos los jueves a las 10 de la mañana, una veintena de mujeres acuden a este espacio en busca de nuevos aprendizajes, así como para realizar algunas gestiones de apoyos gubernamentales.  Todas, empujadas por sus deseos de mayores condiciones en su calidad de vida, migraron hace décadas a esta frontera desde Durango, Oaxaca, Coahuila, Veracruz, Puebla y otros estado de la República, explica Jacqueline Nava, gestora cultural de Arte en el Parque, A.C.  Hoy, estas mujeres llenas de experiencias de vida forman parte de una de las 60 actividades que Arte en el Parque realiza en el suroriente de Ciudad Juárez, con la finalidad de democratizar y ofrecer espacios culturales y artísticos en un sector de la ciudad que, hasta hace unos meses, carecía de estos.  La actividad es un taller que lleva por nombre ‘Recuperando Nuestras Historias’. Jacqueline Nava cuenta que el objetivo es crear un espacio de encuentro cultural y artístico entre las personas de la tercera edad y documentar sus historias de vida. Para este propósito, las mujeres crean marionetas mientras sostienen diálogos sobre la vida cotidiana.  Las sesiones resultan terapéuticas y sirven para crear redes de apoyo entre las adultas mayores; algunas cuentan, mientras construyen el títere, casos de abandono, despojo, problemas de salud, pero en otras ocasiones, se dan consejos, se hacen bromas entre ellas, platican sobre viajes que han realizado a sus lugares de origen, hablan sobre las necesidades que hay en su colonia. 

Sesión del 24 de marzo del taller Recuperando Nuestras Historias. Fotografía: Jonathan Álvarez.
El resultado de este encuentro, cuenta Jacqueline, es la publicación de un libro que plasmará cómo han sido sus vidas en esta frontera y en particular, en la zona suroriente y cómo ellas han resignificado esas historias al contarlas. En el proceso participan un escritor, dos mediadores y una fotógrafa.  “Traen una historia bien impresionante, de lucha, de resiliencia, entrega, compromiso y lealtad, esto lo vamos a ver plasmado en este libro”, detalla la gestora cultural.  Rosalba Herrera, una mujer adulta mayor que asiste al taller, cuenta que el ir a esta actividad ha significado acceder a un espacio en donde se puede relajar y distraer de otras cuestiones que le causan estrés.  Rosalba y una de sus amigas, cuentan que viven en hacinamiento en la colonia Carlos Castillo Peraza, lo que ha ocasionado desencuentros familiares.  “Hay muchos conflictos porque unos piensan de una manera y uno piensa de otra, con estos tallercitos nos distraemos sin que nos cobren un solo peso y sin pagar pasaje porque aquí vivimos cerca casi todas, eso está muy bien”, explica.  El tiempo y la distancia, han resaltado como factores comunes que obstaculizan el acceso a espacios culturales y artísticos en el suroriente de Ciudad Juárez. Las adultas mayores llegan al punto de reunión del taller caminando, algunas, se toman su tiempo y toman breves descansos debido a que les es difícil caminar con rapidez.  Para Rosalba es difícil acudir a espacios para el esparcimiento que se encuentran centralizados en la zona norte de la ciudad, pues no cuenta con los recursos suficientes para pagar los pasajes de los camiones.  “Hacen mucha falta estos espacios aquí, incluso para los jóvenes. Yo llegué de Torreón aquí hace 20 años y la colonia está crítica”, lamenta refiriéndose a la falta de infraestructura pública y de espacios para el esparcimiento.  El taller de ‘Recuperando Nuestras Historias’ le ha brindado la oportunidad de aprender y relajarse, asegura.  Un caso similar es el de Fabiola Pérez, quien perdió a su esposo hace dos años y era quien la acompañaba a donde sea que ella iba. Cuenta que acudir al grupo de adultas mayores le ha servido para sobrellevar su proceso de duelo. Ahora, en el taller, con esmero y delicadeza a pesar de la artritis que padece, Fabiola perfecciona la cara de la que será su marioneta.  Así como Fabiola y Rosalba, otros habitantes del suroriente han encontrado en los talleres y eventos culturales de Arte en el Parque, aquellos espacios artísticos que anteriormente no se encontraban con facilidad. 
Fabiola Pérez en el taller Recuperando Nuestras Historias. Fotografía: Jonathan Álvarez.
Al preguntarles sobre las actividades de esparcimiento que ellos y sus familias realizan en sus tiempos libres, siempre refieren acudir a los centros comerciales y en raras ocasiones, al cine o algún parque fuera del polígono de donde habitan.  El costo de traslado y el tiempo que tienen que invertir para ir a otros espacios culturales centralizados, orilla a que las personas tengan como sus principales fuentes de entretenimiento la televisión, visitar parques cercanos y centros comerciales. El polígono de intervención de Arte en el Parque en el suroriente se encuentra delimitado por la avenida Manuel Talamás Camandari, bulevar Independencia, Paseo de San Isidro y la calle Santiago Troncoso.  El Plan de Desarrollo Urbano Sostenible 2016, indica que esta zona tiene un nivel entre bajo y muy bajo de consolidación urbana. Además, se trata de un sector aislado del resto de la mancha urbana, en donde no se ofrecen las condiciones óptimas de habitabilidad.  De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, las condiciones de pobreza y marginación limitan el acceso a diversos derechos, entre ellos, los derechos culturales. Según el organismo internacional, la pobreza restringe gravemente la capacidad de las personas a ejercer su derecho a participar en los ámbitos de la vida cultural.  Es por lo anterior que la ONU conmina a los Estados a crear oportunidades para que las personas que viven en condiciones de pobreza tengan acceso y participen en la vida cultural mediante la facilitación de espacios públicos en donde las personas de todas las comunidades puedan hacer actividades creativas y de recreación; sin embargo, en la ciudad, el gasto público en cultura representa apenas el 0.36 por ciento, de acuerdo con datos de Así Estamos Juárez 2022, mientras que organizaciones como Arte en el Parque, retoman el reto de descentralizar y democratizar espacios culturales para las periferias.  Acceso a la cultura, una inversión gubernamental de 13 pesos por individuo  De acuerdo con el informe más reciente del sistema de indicadores de calidad de vida de Así Estamos Juárez 2022, en el apartado referente a cultura, los datos oficiales indican que en el Municipio de Juárez, el gasto público en cultura es de apenas el 0.36 por ciento, esto, en el año 2021.  Lo anterior significa un gasto de 13.21 pesos por individuo, una cifra ínfima pero que en realidad ha aumentado en los últimos cinco años, pues en 2017 el gasto per cápita era de apenas 0.97 centavos por persona.  Los juarenses han hecho de la televisión y los centros comerciales sus principales fuentes de recreación y entretenimiento.  El informe revela que siete de cada 10 juarenses tiene como principal actividad recreativa el ir a los centros comerciales. A lo anterior, le sigue la televisión como la actividad recreativa más usada por la población de Juárez. Los porcentajes caen por debajo del 10 por ciento cuando se trata de actividades recreativas en museos, conciertos, zonas históricas, galerías, casas de cultura, conferencias, teatro, danza y bibliotecas.  El panorama en el suroriente de la ciudad no es tan diferente, ya que una encuesta de percepción ciudadana aplicada por la Agencia Estadística de Mercados S. C. da cuenta de que en uno de los polígonos con más población del suroriente las personas dedican su tiempo mayormente al consumo de películas, internet y plazas comerciales; mientras que la asistencia a museos, galerías, casas de cultura, conciertos, bibliotecas y zonas históricas no superan el 3 por ciento. 
Escultura realizada por un niño que participó en el taller ‘Soy Yo’. Fotografía: Jonathan Álvarez.
El suroriente, al margen de los espacios culturales  Para la interventora cultural y encargada de formación y creación de públicos en el Centro Cultural de la Fronteras de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, Araceli Hidalgo, el acceso a la cultura y las artes está centralizado en esta frontera, debido a que la oferta de espacios se encuentran casi siempre en la zona centro (norte geográfico) de la ciudad.  “Estamos replicando algo de lo que nos hemos quejado aquí en el norte, que toda la cultura, todo el apoyo y el acceso está muy centralizado en el país y creo que en la ciudad lo estamos replicando porque la mayoría de las actividades están concentradas en una parte específica de la ciudad”, detalla.  Araceli, es una de las talleristas que se han sumado a la labor de Arte en el Parque para llevar actividades artísticas y de esparcimiento a los públicos de la zona suroriente de Ciudad Juárez. Actualmente atiende a un grupo de niñas y niños en un taller de escultura que tiene como propósito reforzar la identidad individual y el sentido de comunidad.  Una opinión similar es la de Jacqueline Nava, quien considera que existen tres grandes retos para el acceso a la cultura en el suroriente. El primero, es el desconocimiento general que se tiene sobre el derecho de acceso a la cultura, el segundo, es la poca información relativa a los eventos culturales y el tercero, está relacionado con el crecimiento desmedido de la mancha urbana, ya que las actividades culturales suelen suceder en la zona norte de la ciudad.  La cultura y el arte tienen un poder transformador y despiertan los sentidos, sugiere Jacqueline, “siempre he considerado que las disciplinas artísticas se forman desde los sentidos, si despierto esos sentidos muchas cosas se van a transformar. El propiciar estos espacios hace que la convivencia sea distinta”, asegura. 
Taller de pintura en CBTis 270. Fotografía: Jonathan Álvarez.
Hacía la descentralización de los espacios culturales Este año, Arte en el Parque se sumó a una misión de gran magnitud, democratizar los espacios culturales y artísticos en la ciudad. Es por ello, que desde octubre de 2021, se sumó al proyecto de intervención comunitaria en el suroriente de Ciudad Juárez, llamado ‘ComunidadEs Juárez’, el cual es financiado por la Fundación del Empresariado Chihuahuense A.C. (Fechac), en colaboración con la Fundación Comunitaria de la Frontera Norte, A.C., (FCFN). La asociación civil participa en este proyecto organizando y realizando más de 60 actividades artísticas y culturales en menos de un año en el suroriente de la ciudad, entre estas, el taller ‘Recuperando Nuestras Historias’ en el que participan adultas mayores.  “Nosotros como Arte en el Parque observamos que todo lo relacionado con arte y cultura está de este lado (zona norte de la ciudad), vamos a llevar actividades de todo tipo, tenemos talleres, presentaciones de espectáculos, ferias de las artes. Todo lo hacemos con nuestra filosofía por delante que es generar comunidad a través del encuentro con el arte y la cultura”, detalla Jacqueline Nava.  La interventora cultural informa que actualmente hay activos cuatro talleres culturales tanto de pertenencia como de formación artística, además de otras actividades como funciones de cine comunitario y ferias de las artes. El primero es el taller de ‘Recuperando Nuestras Historias’, los jueves por la mañana en la colonia Carlos Castillo Peraza. 
Jacqueline Nava, gestora cultural de Arte en el Parque. Fotografía: Jonathan Álvarez.
La asociación oferta un taller de pintura, todos los sábados por la mañana en el Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (CBTis) 270, ubicado en la colonia Carlos Castillo Peraza.  Ese mismo día, detalla Jacqueline, hay un taller de guitarra y otro taller de pintura en la Escuela Secundaria Federal Número 15 de la colonia Fray García de San Francisco. A la par, este fin de semana concluye el taller ‘Soy yo’ para niñas y niños de la Parroquia San Pedro de Jesús Maldonado, el cual incluyó pintura y escultura.  Es en este último taller en donde Araceli Hidalgo participa dando el taller de escultura, y quien cuenta que se ha llevado experiencias muy gratas de esta actividad. “Yo veo mucha participación, mucha apertura de todos los niños y niñas, hemos hecho cosas increíbles. Los niños tienen mucho interés en seguir aprendiendo sobre los materiales artísticos, son muy detallistas en sus esculturas”, narra. 
Araceli Hidalgo, tallerista de escultura. Fotografía: Jonathan Álvarez.
Cecilia Cornejo, habitante de la colonia Olivia Espinoza lleva a sus cinco nietos al taller que dirige Araceli. Cuenta que debido a su situación económica no suele acudir a actividades recreativas, por lo que vio en el taller de Arte en el Parque, una oportunidad para que sus nietos puedan combatir el estrés causado por la pandemia de Covid-19, menciona.  A su vez, la subdirectora de la Escuela Primaria República de Venezuela, Flor Cristina Haros Olivas, comenta que es difícil que se traigan este tipo de actividades al suroriente. La escuela primaria fue elegida por Arte en el Parque para realizar una Feria de las Artes del 28 al 31 de marzo.  En esta feria, las niñas y niños que asisten a la primaria tuvieron la oportunidad de aprender sobre siete disciplinas artísticas diferentes tales como la pintura, la danza, la creación de cómics, la creación de marionetas, cuentacuentos, escultura y música.  “Estamos muy agradecidos con este tipo de apoyos en este sector. Los niños tienen poco acceso a este tipo de actividades para disfrutar del arte y conocerlo. Aquí los niños fueron partícipes de cada una de las expresiones del arte y eso les agradó mucho”, asegura la subdirectora. 
Feria de las Artes en Escuela Primaria República de Venezuela. Fotografía: Jonathan Álvarez.
Jacqueline y Araceli saben que la labor no termina ofertando los espacios de acceso a la cultura y las artes, sino que le sigue el reto de la apropiación por parte de las comunidades. Ambas esperan que con estos esfuerzos, las personas se conviertan en agentes culturales, conscientes y exigentes de su derecho a la cultura.