La empresa Enalte pertenece a Luis Eduardo Ibarra Molina, accionista mayoritario de Gexiq y hermano del director del Instituto Municipal del Deporte
Ayer, el Ayuntamiento de Juárez aprobó un cambio de uso de suelo para un predio ubicado en la avenida Ejército Nacional, así como un cambio de zonificaciones secundarias en la avenida Ramón Rayón, a favor de la empresa Enalte Desarrollos Inmobiliarios.
Enalte es propiedad de Luis Eduardo Ibarra Molina, hermano de Francisco Javier Ibarra, quien actualmente funge como director del Instituto Municipal del Deporte.
Ambos son accionistas de la empresa constructora Gexiq, una de las más beneficiadas por la administración anterior y que fue denunciada por deficiencias en sus obras de pavimentación y fresado.
Enalte Desarrollos Inmobiliarios fue favorecida con la autorización de un cambio de uso de suelo de una zonificación secundaria de un predio de 29 mil 633 metros cuadrados, así como de un cambio de zonificaciones secundarias de un predio de 99 mil 198 438 metros cuadrados.
El regidor de la planilla Independiente José Ubaldo Solís, quien coordina la Comisión de Desarrollo Urbano, argumentó que este tipo de aprobaciones incentivan el turismo inmobiliario. Por su parte, el panista Eduardo Fernández Sigala cuestionó la construcción de una calle que colindaría en un predio de zona industrial.
El empresario Luis Eduardo Ibarra Molina es el accionista mayoritario de Gexiq, con 3 mil 500 acciones o ‘partes sociales’, frente a las mil 625 que poseen su hermano y su padre, Francisco Ibarra Domínguez.
En febrero, Francisco Javier Ibarra Molina asumió la dirección del Instituto Municipal de Deporte y Cultura Física en sustitución de Ricardo Juárez Lozano, por instrucción del presidente municipal Armando Cabada Alvídrez. Su nombramiento fue oficializado por el Cabildo el dos de marzo.
La empresa Gexiq, de la familia Ibarra, se constituyó como una sociedad anónima de capital variable en el año 2002, y es una filial de las constructoras pertenecientes a Yva S.A.
De 2013 a 2016, durante la administración municipal encabezada inicialmente por Enrique Serrano Escobar y concluida por Javier González Mocken, Gexiq recibió 116 millones de pesos en concepto de mejoramiento de calles.
De 2010 a 2015 se convirtió en el principal proveedor del Municipio con más del 31 por ciento de los contratos de pavimentación.
En ese periodo, la inversión total para obras de pavimentación, bacheo, mecánica de suelos, movilización de mezcla asfáltica, control de calidad, recarpeteo y mejoramiento de suelos fue de 987 millones de pesos. Gexiq recibió 310 millones 653 mil pesos en esos cinco años.
La mala calidad de las obras que Gexiq realizó fue denunciada en múltiples ocasiones por el ex-regidor José Márquez Puentes, entonces coordinador de la Comisión de Desarrollo Urbano y secretario de la de Obras Públicas, y actual integrante de la Fiscalía Ciudadana Anticorrupción, por supuestos ‘vicios ocultos’ en los trabajos de pavimentación y deficiencia en el grosor de la carpeta asfáltica colocada por la empresa. No obstante, las solicitudes de investigar a la empresa y sacarla del padrón de proveedores fueron negadas por el anterior Ayuntamiento, de mayoría priista.
Esto derivó en una denuncia formal interpuesta ante la Contraloría Municipal por la asociación civil Plan Estratégico de Juárez (el 16 de noviembre de 2016), en la que se señaló que “es inadmisible que la actual administración tenga que realizar nuevas erogaciones para reparar las mismas vialidades”, por lo cual se exhortó al presidente municipal Armando Cabada a hacer efectivas las garantías de los contratos.
Poco antes de terminar 2016, el 21 de diciembre, la Contraloría emitió el oficio CM/236/2016 en el que recomienda a los comités relacionados con procesos de licitación y adquisición de bienes de la actual administración, desestimar la participación de Gexiq “en cualquier procedimiento que tenga por objeto la adjudicación de obra pública o la adquisición de algún bien, ya sea como proveedor o contratista.”
Enalte Desarrollos Inmobiliarios es una empresa de reciente creación, pues de acuerdo con su acta constitutiva, la inmobiliaria se constituyó en marzo de 2016, con Ibarra Molina y Carlos Enrique Méndez Grado como sus dueños.
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