La construcción de Plaza Bistro fue detenida por la Dirección de Desarrollo Urbano; actualmente, se ha determinado que la empresa encargada deberá demoler aquellas partes que incumplan con la reglamentación municipal
La constructora Copachisa tendrá que demoler las partes de la Plaza Bistro que incumplan con las normas expuestas en el Plan de Desarrollo Urbano, después de que mil familias de Campos Elíseos se organizaran para denunciar las fallas de la construcción a la dirección de Desarrollo Urbano.
Guillermo Garza Martínez, vocero de los vecinos, mencionó que la empresa podrá decidir entre derribar solamente las áreas que violentan los reglamentos de construcción, volver a replantear la construcción de la plaza, u optar por demoler por completo la infraestructura que ya estaba en un nivel avanzado.
Si Copachisa decidiera la primera opción, “los locales quedarían muy pequeñitos”, dijo Garza Martínez, por ello se cree que las dos opciones restantes son las más factibles.
“Lo que está pidiendo el Municipio, y nosotros como vecinos, es que nada más se pongan dentro de la normatividad”, puntualizó el vocero.
A la constructora se le dio una segunda prórroga de 10 días, que comenzó desde ayer, para que replantearan la forma de la edificación, respetando el gasoducto que pasa por la avenida Campos Elíseos y los cables de alta tensión de la Comisión Federal de Electricidad, además de otras irregularidades.
La primera vez que se les otorgó la prórroga, debían demostrar que la construcción estaba en orden y que cumplía todos los requisitos para continuar el proyecto, y “el Instituto Municipal de Planeación e Investigación, la Comisión Federal de Electricidad y otra dependencia federal del gas, se encargaron de hacer el análisis; la conclusión de Desarrollo Urbano fue que incumplía con muchas normas”, dijo el vocero vecinal.
Las acciones de los vecinos para exigir su seguridad y hacer cumplir las leyes comenzaron en septiembre de este año, durante la administración de Javier González Mocken.
Sin embargo, nunca tuvieron respuesta por parte de los pasados encargados de la dirección, por lo que tuvieron que seguir insistiendo cuando Armando Cabada Alvídrez y los nuevos encargados de las direcciones llegaron a la administración municipal.
El comité de vecinos, con la ayuda de una arquitecta, hicieron un peritaje a la construcción para mostrarlo a la actual directora de Desarrollo Urbano, Lilia Méndez Rentería, quien detuvo la obra al revisar que la empresa carecía del permiso para construir.
“La parte más importante que ha funcionado para nosotros es la vigilancia, todos los vecinos están participando”, expresó Garza Martínez.