Arresto domiciliario de sacerdote: con cambio de juez, audiencia exprés y sin elementos nuevos

Ciudad Juárez, Chihuahua.- El cambio de medida cautelar de prisión preventiva a arraigo domiciliario realizado al sacerdote acusado de violación y abuso sexual, Aristeo Baca, fue discrecional, parcial, sin perspectiva de género, sin enfoque de derechos y sin tomar en cuenta el interés superior de la niña, denunció el Movimiento de Mujeres de Ciudad Juárez. Por su parte, el gobernador del estado, Javier Corral Jurado, dijo cuestionado al respecto: “Con relación al cambio de medida cautelar al padre Aristeo Baca, es una decisión del Poder Judicial que no le corresponde al Ejecutivo”. El domingo 24 de febrero se realizó una segunda revisión de las medidas cautelares del sacerdote en la que se determinó el arraigo domiciliario argumentando la edad del imputado y su estado de salud. Sin embargo, para las integrantes del Movimiento de Mujeres el proceso fue inconsistente y discrecional. Primero porque no se notificó de manera directa a la defensa de la víctima. Además, la audiencia fue presidida por el juez Félix Aurelio Guerra, que desconocía los antecedentes del caso, de acuerdo con las activistas. Además, aseguraron, la defensa del sacerdote no presentó elementos nuevos para sustentar el cambio en las medidas cautelares que ya habían sido fijadas por la jueza de control Raquel Carlos Ávila, once días antes. “Baca Olmos tiene hipertensión desde hace años, esta condición no pone en riesgo su vida y le permite enfrentar el proceso en prisión preventiva cumpliendo con la medida cautelar que protege a la víctima”, manifestaron a través de un comunicado. De acuerdo con las integrantes esta decisión genera un proceso desfavorable para la víctima debido a las conexiones del sacerdote con poderes económicos y políticos que resultaron en el cambio de medida cautelar y que podrían afectar todo el proceso. “Nos preocupa que con este hecho se reitere la inequidad en el acceso a la justicia para las víctimas y que el mensaje que se envía a la comunidad es nuevamente de impunidad, misma que ha generado violencia en contra de niñas y mujeres; y feminicidios desde los años noventa”, expresaron. “Creemos que situaciones como esta provocan que las víctimas desistan de presentar su denuncia, lo que seguirá manteniendo a Juárez como la ciudad que tiene el primer lugar en violencia sexual contra mujeres, niñas, niños y adolescentes”, aseguraron. También puntualizaron que el despacho jurídico que representa al sacerdote Aristeo Baca ha llevado casos de pedofilia vinculados a las iglesias cristianas y católicas. “Informamos a la comunidad que el juicio por violación sexual agravada contra Aristeo Baca Olmos continúa y que el hecho de que enfrente el proceso en la comodidad de su casa (arraigo domiciliario) no es sinónimo de inocencia”, dijeron. Finalizaron su comunicado invitando a la comunidad a creer a las víctimas, a no guardar silencio y a buscar justicia por todos los medios posibles.