abril 24, 2024

Anapra podría terminar con 20 años de agua salada en la red pública

Ciudad Juárez, Chihuahua.— En la colonia Puerto Anapra, al norponiente de la ciudad, hay 4 mil 576 viviendas conectadas a la red de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento  (JMAS) que reciben cada día agua salada. Agua que contiene niveles de cloruro, sólidos disueltos totales, sodio y sulfatos por encima de lo establecido en la Norma Oficial Mexicana establecida para este rubro, que es la NOM-127-SSA1-1994, eso es un hecho. Por este motivo, un grupo de ciudadanos, habitantes de dicha zona, se organizó para buscar un diálogo con la JMAS para manifestar su inconformidad con que en el recibo de dicha dependencia se establezca un cobro por agua potable, cuando el agua que reciben no es potable, dijo José de Jesús Durón, integrante del Frente del Derecho al Agua.

“Podemos hablar en promedio de unas 5 mil familias. La problemática consiste en que el agua que distribuye la Junta Municipal de Aguas es agua salada y la cobra como agua potable. La Junta de Aguas se está haciendo de un lucro indebido porque está vendiendo algo que no es”, dice Jesús Durón.

Luego de buscar un diálogo con la JMAS y enviar solicitudes que no tuvieron respuesta, el Frente del Derecho al Agua buscó la intervención de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos e interpuso una queja que fue recibida los primeros días de junio del 2018. La Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) inició una investigación y concluyó que la JMAS violó el derecho al acceso a agua potable de los habitantes de Anapra, por lo que emitió la Recomendación 45/2019. En un primer momento, la JMAS respondió a la queja interpuesta ante la CEDH por los habitantes de Anapra y dijo sobre el agua de la zona: “Debo decirle que dichos parámetros son los contenidos en la Norma Oficial Mexicana establecida para tal efecto, que es la NOM-127-SSA1-1994 y las modificaciones a la misma”, de acuerdo con el documento firmado por Jorge Domínguez Cortés, presidente de la JMAS. Pero resultó mentira. El análisis de del agua en cuatro pozos que abastecen a la colonia Puerto Anapra fue realizado por la misma JMAS y, de acuerdo con los resultados del monitoreo remitidos, entre el 26 de marzo y el 17 de julio de 2018 el agua de dichos pozos cumplía con las normas establecidas. La CEDH pidió dichos resultados a la JMAS y luego solicitó la colaboración de la UACJ para que a través de especialistas en la materia emitieran un dictamen que determinó que: “Los niveles de cloruro, sólidos disueltos totales, sodio y sulfatos sobrepasan los límites máximos en la referida norma”. Sin embargo, a pesar de que la JMAS argumentó en un primer momento cumplir con los niveles establecidos en la NOM, también dijo que cuentan con cinco casetas repartidoras de agua potable en las que las personas acuden con sus garrafones para llevar agua potable.

Estación de agua potable en Puerto Anapra / Foto: Favia Lucero
Es decir, en su primera respuesta dijo que el agua que se suministra en Anapra es potable y, a la vez, estableció cinco puntos para repartir agua potable en plantas purificadoras de manera gratuita. Pero en entrevista con el director de la JMAS, este negó que hubiera respondido a la CEDH que el agua cumplía con los estándares de la norma.

“Eso no es cierto. Si lo lee bien nos preguntan con base en qué criterios hicimos el análisis y nosotros contestamos a Conagua, que fue el que nos preguntó, nunca dijimos que el agua fuera potable”, mencionó Domínguez Cortés.

La Comisión Estatal de Derechos Humanos estableció que: “Existen irregularidades por parte de servidores públicos de la JMAS con relación a la calidad del agua que se brinda a los pobladores de la colonia Q, pues la Comisión pudo comprobar que el agua que se brinda en las casas de los habitantes de la circunscripción territorial en mención no es potable ni apta para el consumo humano”. Por lo anterior emitió las siguientes recomendaciones:

  • 68. En razón de que el presente caso tiene que ver con los derechos humanos de acceso al agua, a la protección de la salud, a la alimentación adecuada y a un medio ambiente sano de los habitantes de la colonia “Q”, la Comisión Estatal considera necesario que se lleven a cabo acciones de restitución, satisfacción y no repetición de violaciones a derechos humanos para generar las condiciones adecuadas que permitan el goce y ejercicio de las prerrogativas antes mencionadas.
  • 69. De conformidad con la fracción X del artículo 22 de la Ley del Agua del Estado de Chihuahua la Junta Municipal de Agua y Saneamiento deberá tomar las medidas necesarias para garantizar que el agua que se distribuye a la población de “Q” sea suficiente y salubre para consumo personal y doméstico, para lo cual deberá ejecutar un sistema de monitoreo constante en la referida zona.
  • 70. En atención a lo apremiante que es contar con agua para el consumo personal y doméstico en forma suficiente y salubre, es necesario que la Junta Municipal de Agua y Saneamiento de Juárez realice las acciones necesarias para la implementación de un programa específico que tenga por objeto la realización de acciones que brinden de manera efectiva un acceso suficiente y salubre de agua potable a la colonia “Q”.
  • 71. Para evitar que las víctimas vuelvan a ser objeto de violaciones a sus derechos humanos es necesario que la Junta Municipal de Agua y Saneamiento brinde capacitación a sus servidores públicos sobre la relación que guardan sus 24 atribuciones con el goce y ejercicio de los derechos humanos e instrumentos internacionales analizados en la presente Recomendación.

Para José de Jesús Durón, el problema de la sal en el agua lleva a afectaciones no sólo materiales — como el desgaste de las tuberías, aires acondiciones y calentadores de agua—, sino con daños a la salud de los habitantes de Anapra, sobre todo porque esa agua llega a los bebederos en los planteles escolares.

“No pueden presentarse como gente muy eficiente cuando mil 500 niños están deteriorando su salud aquí cada día y nadie se da por enterado”, dijo.

Por su parte, el presidente de la JMAS dijo que “se puede tomar el agua de Anapra varias veces y no le va a pasar nada. A la larga a lo mejor le ocasiona algún problema de digestión o una cosa por el estilo, por ser un poco más alta en esos cloruros”. Respecto a la recomendación dijo que: “Se va aceptar porque es una cosa que no podemos negar, es una cosa obvia, pero también vamos a argumentar lo que hemos hecho y lo que no se debió haber hecho porque en realidad nunca se debió establecer una red de agua potable ahí”. Dijo que como reparación del daño se establecerá el cobro mínimo a todos los habitantes de Puerto Anapra, que es de diez metros cúbicos, lo que equivale a 210 pesos mensuales, aproximadamente. “Ahí lo que vamos a hacer es tratar que Anapra tenga agua potable en la red sin necesidad de las máquinas purificadoras. En eso va a consistir la reparación del daño”, continuó. “Yo nomás quisiera decir que es un problema que tiene 20 años y ahora que se está solucionando es cuando más se hace ruido con él; pero bueno, no hay problema por eso, eso no nos quita la obligación de hacerlo”, finalizó. https://www.youtube.com/watch?v=Um7rFy9HLuY&feature=youtu.be