Ciudad Juárez, Chihuahua.— Jazmín* huyó de Guatemala con sus tres hijos por la violencia intrafamiliar y la pobreza que sufrió. La primera vez que se entregó a las autoridades estadounidenses fue en marzo de 2019: la retornaron a Juárez en mayo de 2019 bajo el Protocolo de Protección a Migrantes (MPP, por su siglas en inglés). En esta frontera estuvo trabajando en lugares donde le pagaban 100 pesos por 10 horas, sin servicio de salud ni educación para sus hijos debido a su estatus migratorio en México. Bajo esas condiciones, el crimen organizado la acosó y persiguió para que entregara a su hija mayor para ser prostituida. Se negó, pero el acosó no cesó y la amenazaron con tomar represalias contra su hijo. Cristina Coronado Flores, del Ministerio de Movilidad Humana, expuso el caso de Jazmín en el foro “La actualidad de los flujos migratorios en Ciudad Juárez, 2021: ¿Qué hacemos?”, como un ejemplo de la situación que están enfrentando los migrantes que son retornados a México por esta frontera.
“Es cierto que México no es responsable de la crisis que está pasando, pero sí somos responsables de la manera en que nosotros respondemos cuando pasan por aquí. Creo que es el reto más importante que tenemos para poder organizar una respuesta comunitaria responsable y humanitaria”, expresó.
Coronado Flores señaló que, a pesar de que existen registros de quiénes están en los albergues, hay migrantes que están “en la oscuridad completa”, en manos de la delincuencia organizada. “Hay un fracaso en las políticas estatal, federal y local de cómo recibir migrantes y también de mexicanos: que esta sea una oportunidad real para poder tener una respuesta”. 
Noviembre, la reanudación de los MPP
Las organizaciones de la sociedad civil fronterizas y las organizaciones de cooperación internacional manifestaron su preocupación ante la posible reanudación de los MPP o ‘Remain in Mexico’ el próximo 8 de noviembre, que obliga a los migrantes a esperar del lado mexicano durante su proceso migratorio. Rubén García, director Casa Anunciación, señaló que ante la inminente reimplementación de los MPP, Estados Unidos debe preguntarse “¿Por qué esa política? (que pide a los migrantes permanecer en México bajo condiciones que los exponen)”, mientras que las autoridades de México “¿por qué están aceptando eso?”. El activista señaló que si las autoridades mexicanas van a permitir eso, deben demostrar que existen recursos necesarios y que están disponibles para asegurar que se puede dar cuidado y albergue a toda esta gente. Alex Rigol, de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), dijo que el escenario que Juárez enfrentará en tres semanas, ante la llegada de personas retornadas bajo el MPP, es un buen momento para una coordinación interinstitucional que dé respuesta a las necesidades de las personas migrantes. “Necesitamos establecer un diálogo fuerte transparente horizontal, entre Ciudad Juárez y El Paso, organización y gobiernos donde podamos ver qué está pasando y darle respuesta”, comentó. Rigol aseguró que México tiene un pendiente en la regularización migratoria: “existen pocos espacios para poder acceder a un empleo formal y ejercer sus derechos humanos, que sirvan para prevenir caer en redes de personas que se quieren aprovechar”. Los MPP se implementaron a inicios de 2019, pero llegaron a su fin en febrero del 2021. En agosto, la Suprema Corte de Estados Unidos obligó a la administración de Joe Biden a restablecer el programa que implica la devolución de solicitantes.
