Ciudad Juárez, Chihuahua.— Hoy la Región 1, que incluye al municipio de Juárez y a otros nueve municipios colindantes, avanza al color naranja en el semáforo de reapertura COVID-19. El pasado 19 de junio el gobernador Javier Corral anunció el cambio en el semáforo para la región norte del estado, que contempla la reactivación de negocios y actividades sociales de forma escalonada. De acuerdo con el Plan de Reapertura Estatal COVID-19, las actividades en el color naranja, o de riesgo alto, que podrán operar al 100 por ciento son las esenciales (salud, agricultura, estancias infantiles, obra pública, servicios básicos, alimentación, minería y construcción), así como los servicios de atención gubernamentales y oficinas administrativas esenciales. Con un aforo del 50 por ciento podrán reactivarse las nuevas actividades esenciales, que son manufactura aeroespacial y automotriz; los restaurantes, siempre y cuando tengan cerradas sus áreas infantiles y cumplan con las medidas de sana distancia; los spas, estéticas y el resto de consultorios médicos (a excepción de los consultorios dentales que solo pueden atender emergencias) que deberán desinfectar el espacio antes de la atención a cada cliente y atender únicamente con cita. Los parques, plazas, zonas ecoturísticas y centros deportivos abiertos podrán operar solo con la mitad de su aforo, al igual que los servicios de atención gubernamentales y oficinas administrativas no esenciales. Las industrias no esenciales, los hoteles, comercios locales ambulantes y semi-fijos tendrán la capacidad de recibir al 30 por ciento de su aforo, sin áreas comunes y con medidas de sana distancia. Los salones de eventos, bares, centros nocturnos, áreas de bar en restaurantes, balnearios, los casinos, comercios dentro de centros comerciales, así como museos, iglesias, centros deportivos cerrados, cines, centros culturales y todas las actividades escolares de todos los niveles permanecen suspendidas. 
En lo que respecta a los restaurantes de la Región 1, también denominada ‘Región Juárez’, la Secretaría de Gobernación dictó los lineamientos que deberán seguir durante su paso en el color naranja.
“Sanitización exhaustiva de todo el local, poniendo especial énfasis en ductos de ventilación y campanas de extracción en las cocinas, cuyos filtros deberán cambiarse periódicamente, acorde a lo establecido por el proveedor. El establecimiento deberá contar con medios claros de ventilación, ya sean naturales o mecánicos. Garantizar el abasto de insumos de limpieza y desinfección. Y establecer protocolos personales de limpieza y desinfección diaria, que incluya lavar superficies con agua y jabón, y con una solución de cloro 15 ml en un litro de agua”, informó Gobernación.
Al interior de las cocinas es imperativo que el personal use el cabello recogido con ligas o red, uñas cortas sin esmalte, sin joyas ni accesorios. Los empaques de los productos e ingredientes deberán ser desinfectados, así como todas las superficies y herramientas en la cocina. Los trabajadores deberán tener sus propios utensilios y, en caso de prestarlos con sus compañeros, se deben limpiar en cada uso. También deben tener su área de preparación aislada. Se debe limitar el contacto con los ingredientes, por lo que se recomienda usar pinzas y optar por el uso de botes de basura con pedal para su apertura. De forma obligatoria todos deberán usar cubrebocas en todo momento y evitar el uso de caretas, por ser de materiales flamables. En el área del restaurante, es indispensable que se tenga al menos un dispensador de gel antibacterial a la entrada del establecimiento. Las mesas deben tener una distancia de 1.5 metros entre cada una y no se deben permitir reuniones de grupo, ni juntar mesas, ni grupos musicales. Los salones privados o salas de juntas dentro de los mismos no se podrán usar hasta que el semáforo esté en el color verde. Se recomienda que las áreas de espera sean al aire libre y con señalización para designar distancias seguras. Asimismo, deben limpiar al menos dos veces al día todos los espacios comunes y superficies, mantener las puertas abiertas, eliminar las estaciones o máquinas de autoservicio para evitar las filas y la manipulación de utensilios. Fomentar el pago con tarjeta para reducir la manipulación de dinero en efectivo, instalar un contendor especial para dejar la propina. Los menús deben ser sanitizados antes y después de cada uso y se recomienda no usar manteles. Las mesas deberán montarse enfrente del cliente para evitar el tiempo de exposición de cubiertos y platos, antes de ser usados. El uso de las barras de bar está prohibido, sin embargo la venta de alcohol se podrá dar dentro del horario establecido en el permiso que cuente el local. En caso de que se trate de un buffet, el personal que sirve deberá cambiar su cubrebocas y guantes cada cuatro horas, se tienen que instalar señaléticas para la sana distancia y cubiertas antiestornudos. Los proveedores también deberán cumplir con medidas de higiene y control, establecer zonas y horarios específicos para la entrega de productos y promover la entrega de factura y pago de forma electrónica. Los restaurantes que no cumplan los lineamientos establecidos por Gobernación podrán recibir sanciones, indicó la dependencia. Por su parte, el Gobernador recordó que es necesaria la responsabilidad y solidaridad de todas y todos para que el semáforo siga avanzando de manera correcta.
“Estamos en un momento de responsabilidad, de solidaridad entre todos nosotros, de cuidado de unos a los otros: Todos debemos de cuidarnos porque ésta es una etapa en donde se incrementan los contagios y hay también ciertos riesgos de rebrote, esperemos que no sea sí pero hay que estar siempre alerta”, dijo esta mañana.
