diciembre 19, 2025

Narco y violencia de género, principales problemáticas en materia de seguridad

Violencia familiar:  “Es el acto abusivo de poder u omisión intencional, dirigido a dominar, someter, controlar, o agredir de manera física, verbal, psicológica, patrimonial, económica y sexual a las mujeres, dentro o fuera del domicilio familiar, cuyo Agresor tenga o haya tenido relación de parentesco por consanguinidad o afinidad, de matrimonio, concubinato, o mantengan o hayan mantenido una relación de hecho”. – Ley General de Acceso de las Mujeres a Una Vida Libre de Violencia

Ciudad Juárez, Chihuahua.— Actualmente existen 48 elementos policíacos activos en la Unidad Especializada de Violencia Doméstica (Unevid) de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, la cual se encarga de trabajar los casos de violencia intrafamiliar denunciados en esta frontera, así como brindar atención y diversos tipos de apoyo a las víctimas. Sin embargo, 48 policías no son suficientes para una ciudad que ocupa el tercer lugar entre los 100 primeros municipios del país con presuntos delitos de feminicidio, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el documento ‘Información sobre violencia contra las mujeres, Incidencia delictiva y llamadas de emergencia 911’, con corte al 30 de septiembre de 2019. Al menos esto es lo que opina la directora del Instituto Municipal de las Mujeres (IMM), Verónica Corchado Espinoza, quien hace unas semanas solicitó a las comisiones edilicias de ‘Mujer y Equidad de Género’ y ‘Seguridad Pública’, se refuerce con más elementos la Unevid para que se pueda dar mayor atención a esta problemática. https://www.youtube.com/watch?v=GKVa7NL9rKE “Nuestra ecuación es sencilla: son seis distritos de policías, vamos a tener un séptimo, el de Riberas del Bravo; si queremos que 24/7 existan policías los tres turnos, mínimo tienen que ser 20 o 15 policías por turno”, comenta. De esta forma, la Unevid podría pasar de los 48 elementos a casi 200, la cifra deseada por la directora del IMM, quien por otro lado reconoce que será una ardua labor ya que los policías que forman parte de esta unidad especializada deben tomar capacitaciones de tiempo completo por más de 224 horas.

“Lo óptimo sería que toda la corporación actuara bajo el Protocolo Policial de Atención a Mujeres Víctimas de Violencia, que yo creo tampoco es descabellado. Lo que pasa es que esta administración tiene que dejar las bases para que las siguientes sigan el ritmo para que en un momento todos los policías tengan una currícula de perspectiva de género”, agrega.

Aún en el escenario en el que se logrará tener toda una Secretaría de Seguridad Pública capacitada, Corchado Espinoza, piensa que la Unevid debe contener únicamente a policías especializados y expertos en el tema. Por su parte, el secretario de Seguridad Pública, Raúl Ávila Ibarra, asegura que ya se encuentran revisando la solicitud del IMM: “Son unidades con una capacitación especial, un perfil especial y estamos en el estudio de los perfiles para que el personal que ingrese a esta unidad cumpla con la expectativa que se tiene para reforzar el servicio”.

La directora del IMM, Verónica Corchado Espinoza / Foto: Marco Antonio López

Suroriente, el epicentro de la violencia de familiar

“Hay dos ejes que nos están impactando ahorita en materia de seguridad: el narcomenudeo y la violencia intrafamiliar”, comenta Ávila Ibarra. Las cifras recopiladas por la SSPM lo confirman: del 2016 (año en el que se realizaron 897 detenciones) al 2017 (con 2 mil 300) hubo un incremento del 156 por ciento en detenciones por violencia familiar. Y aunque en el 2018 la SSPM registró dos mil 201 detenciones, 99 menos que en el 2017, las cifras son altas. De acuerdo con la información de la Policía Municipal, proporcionada por la unidad municipal de transparencia, hasta septiembre del presente año se han detenido a mil 821 agresores, de los cuales mil 655 son hombres y 166 mujeres. La Unevid registra cifras más bajas sobre el tema pero que también permiten ver un incremento: en el 2016 contabilizó 273 detenciones; en el 2017, 373; para el 2018, 890 y hasta septiembre de este año, 790. Dichas cifras, además, muestran que desde el 2016 hasta septiembre del 2019, el distrito con mayor número de incidencia por violencia familiar fue el de Valle, ubicado en la zona suroriente de la ciudad. Corchado Espinoza menciona que el aumento de casos de violencia familiar también se puede relacionar con el “envalentonamiento de las mujeres a denunciar”, puesto que los recientes movimientos feministas han impulsado a las mujeres a exponer las violencias de las que son víctimas.

“No veo un indicador claro por el que podamos decir ‘ahora hay más violencia que hace 15 años’; no, porque yo creo quienes hemos trabajado el tema sabemos que las violencias han estado siempre pero que los mecanismos para poder denunciar, esos no estaban”, declara la directora del IMM.

Así mismo, reflexiona sobre el fenómeno de violencia familiar en el suroriente de esta frontera, el cual califica como una grave problemática que debe ser atacada desde diversos frentes, tanto públicos como privados. Después de realizar grupos focales con mujeres que viven en esa zona, el IMM ha determinado que una de las mayores limitantes es la falta de transporte público que le permita a las mujeres trasladarse a las instancias correspondientes que les puedan brindar apoyos y asesorías.

“Esas mujeres no pueden llegar de manera efectiva a la Fiscalía a poner una denuncia, menos si es en la noche. La otra es que cuando logran llegar a las instituciones, estas ya están sobrecargadas por las mismas problemáticas. Por eso hemos dicho que se requiere mayor fortalecimiento a todo el tema de prevención y al tema de procuración de justicia, porque a una mujer que no puede hacer una denuncia, o que la hagan esperar, la vacunas frente a esa situación y la violencia cada vez se va a incrementar”, puntualiza.

En respuesta a dicha problemática, el Gobierno Municipal ha trabajado con diversas dependencias y direcciones en la Estrategia Integral de Atención a la Prevención de la Violencia en el suroriente, que tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de las personas que habitan el sector. Su trabajo consiste en reforzar los centros comunitarios, los comités de vecinos, brindar asistencia psicológica, alimenticia, impartir talleres y cursos, habilitar rutas seguras, recuperar espacios públicos y fomentar la participación comunitaria para que las y los vecinos tengan las herramientas necesarias para lidiar con los conflictos, explica de forma resumida Corchado Espinoza. Siguiendo la misma línea, el secretario de Seguridad Pública asegura que la Unidad de Vinculación y Proximidad Social de la SSPM acude a las colonias con mayor incidencia para atender los casos, y que también imparten charlas en instituciones educativas y laborales para prevenir la violencia familiar. “Frente a una mujer violentada, empobrecida, toda su red padece lo mismo: dolor, sufrimiento, empobrecimiento. Y en ese sentido los esfuerzos que se hagan, integrales, son muy valiosos”, finaliza la directora del Instituto Municipal de las Mujeres.